PREVIO GP ESTADOS UNIDOS



 Bueno amigos, se acaba el mundial, llegamos a la penúltima cita del calendario. Pasamos ya la gira asiática para llegar al nuevo continente donde se disputará las dos últimas carreras del año. El próximo fin de semana toca que el gran circo de la F1 inaugure el flamante Circuito  de las Américas, en Austin, Texas. La F1 vuelve a Estados Unidos después de una relación amor odio que terminó mal después de el esperpento de la cita en Indianápolis 2007 con seis coches en pista tras la metedura de pata de Michelín. No es una categoría demasiado querida por los estadounidenses, más afines al estilo de la Nascar, con trazados ovalados, monótonos donde los haya pero que mueve a 300 mil espectadores, ahí es nada. La Indycar, la imagen en que se inspiro Mosley para hacer su visión de la F1 se considera una categoría inferior, así que la F1 ni os cuento.

En este trazado inédito se puede decidir el título, quién sabe, Vettel afronta su primer match point aunque no lo tendrá fácil, en esta carrera entra en juego un factor nuevo este año el de la capacidad de los equipos para adaptarse lo antes posible a las características del trazado, de modo que puedan conseguir el máximo rendimiento y una ventaja estratégica sobre el resto de las escuderías. Igualmente, los pilotos se enfrentarán a algo desconocido, salvo por lo entrenado en los simuladores.
Lo primero que hay que decir del circuito de Austin es que es el primero construido en Estados Unidos específicamente para la Fórmula 1. Tiene una longitud de 5,52 kilómetros, al que se darán 56 vueltas para un total de 306 kilómetros de distancia de carrera. Cuenta con 15 curvas, diez a derechas y cinco a izquierdas y tiene tres rectas con fuertes frenadas ideales para adelantar. Se espera un tiempo de vuelta rápida en calificación entorno al 1:37 y en carrera sobre 1:42.
La características de el trazado de las Américas son estos
Largo, rápido, variado y con varios puntos  de adelantamiento. Posee más curvas de alta velocidad (por encima de 250 km/h) que el trazado de Spa, una de las referencias en este sentido, que se concentran en una zona inicial de ‘eses’ en la primera parte del circuito, muy parecida a las de Suzuka o a las enlazadas de Becketts en Silverstone.

Sin embargo, la curva más espectacular será la primera, ¡ay Dios, cógenos confesados!  Es una horquilla de primera velocidad en la que desemboca la recta de meta ¡la que se puede liar! Como no califique Fernando en la cabeza se puede meter en un embudo tremendo, con el peligro que conlleva. Esta curva tiene la particularidad de que es en subida, con un brutal desnivel de más de cuarenta metros respecto a la zona de la pole. Como en muchos de los circuitos diseñados por Hermann Tilke (este es otro de ellos), los cambios de nivel son uno de sus rasgos característicos.
La parte central la presiden dos largas rectas donde podrían alcanzarse los 315 km/h, que dan paso a una parte final es más lenta y técnica. De hecho, Austin tiene más curvas de baja velocidad (por debajo de 100 km/h) que el trazado de Hungaroring, uno de los más lentos del campeonato.
Por tanto, un circuito  lleno de desafíos. Tiene varias características únicas que lo hacen bastante complejo. Pondrá a prueba la capacidad incluso de los conductores más experimentados. La FIA ha marcado una sola zona para la activación del DRS, se podrá activar durante 650 metrosantes de de la curva 12, para que los pilotos puedan adelantar durante la recta.

Es una pista dura con los motores, se mantienen a máximo régimen durante un periodo largo de tiempo, Los frenos también sufrirán, tiene tres fuertes frenadas tras las rectas aunque las altas velocidades facilitaran su refrigeración. La carga aerodinámica será media-alta, según se quiera. Como costumbre Red Bull ira con carga alta ya que las “eses” y la zona revirada antes de llegar a meta les viene como anillo al dedo aunque viendo el ritmo de carrera de Vettel cuando le cambaron el set up del coche en Abu Dhabi pueda que cambien algo su estrategia, no sea que suceda algún incidente en carrera que te impida remontar si tu velocidad punta en mala. Ferrari no creo que haya cambios, irá con carga media casi con toda seguridad.
Todo esto es la teoría, que habrá que completar con otros factores que sólo podrán descubrirse in situ. Es el caso de la altura de los pianos o las características del asfalto, que marcará el nivel de degradación de las gomas. Pirelli llevará los dos compuestos más duros a Austin, lo que ya nos da una pista en este sentido. Los equipos dispondrán de los neumáticos duros y medios de su gama P-Zero, una opción muy conservadora, han preferido curarse en salud ya que al no disponer de datos sobre lo abrasivo de la pista prefieren que no haya sorpresas desagradables para algunos. ¿Quién decía que Pirelli beneficiaba a Ferrari? Dado que es la primera vez que la Fórmula 1 visita Austin, la marca milanesa ofrecerá un juego de neumáticos duros adicional el viernes para que los equipos puedan acumular más kilómetros durante las dos sesiones de entrenamientos libres del viernes. Sus curvas rápidas, las “eses” fuerzan mucho la estructura de las ruedas, veremos seguramente dos paradas como opción estratégica pero ya os digo, luego resultará que no es ara tanto y con los blando podrán llegar a meta.
No esperéis sorpresas con el tiempo, sol y algunas nubes, pero nada de lluvia. Las temperaturas serán agradables, no hará excesivo calor.
http://www.accuweather.com/es/us/austin-tx/78701/weekend-weather/351193
La incógnita de todos reside en las características de los trazados. ¿Benefician o perjudican a Alonso? La gran pregunta, yo creo que le beneficia a él, aunque no tanto al coche. La realidad es que el español juega dos finales en un lugar inédito para todos (Austin) y en un viejo escenario en el que nunca ha ganado (Sao Paulo). Sin embargo, un palpitó convierte el reto en fascinante. Esperemos que el buen hacer y la suerte se alíen de su lado, pero eso será otra historia.