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Formación para los laicos



            El jueves 20 de marzo, a las 20 horas, en el salón parroquial de Tapia de Casariego comenzará la ‘Formación para los laicos’. Estas charlas tendrá lugar todos los jueves a esa misma hora y sólo se interrumpirá en los tiempos vacacionales o cuando coincida con alguna fiesta.
            Las charlas las tengo escritas y las grabaré, además, en audio. Por lo tanto, quienes lo deseen, pueden pedírmelas y, una vez que las tengan en su poder, pueden compartirlas con otras personas sin falta de pedirme permiso. Ya lo decía Jesús: “Lo que gratis habéis recibido, dadlo gratis” (Mt. 10, 8).


¡Estáis todos invitados!





            Como vengo diciendo repetidas veces en estos últimos meses, percibo claramente una serie de necesidades en nuestra Iglesia asturiana (y ello puede ser extrapolado a otras Iglesias): existe un progresivo envejecimiento del clero y, por ello, una desaparición de importante del mismo. En pocos años preveo que en la parte noroccidental de Asturias habrá un párroco en Vegadeo, otro en Tapia de Casariego, otro en Navia y otro en Luarca y tendrán que atender también parroquias situadas en Grandas de Salime, en Boal y hasta cerca de Tineo. Ante esta situación, ¿qué va a ser de los fieles de tantas parroquias, ya que les va a faltar una asistencia espiritual cercana y constante por parte de los sacerdotes? Es decir, no tendrán sacerdotes para enterrar a sus difuntos, para celebrar las fiestas patronales, para visitar e impartir los sacramentos a los enfermos y ancianos, para celebrarles la Misa dominical en los fines de semana, para organizar los catecismos de 1ª Comunión e impartirla a los niños…; en definitiva, para acompañarlos en su fe.
            Ante esta situación, ¿qué podemos y debemos hacer? ‘Nada, cruzarnos de brazos y esperar a que vengan tiempos mejores’. Yo me niego a esto. Por eso, he elaborado este temario, que titulo así: “Formación para los laicos”, a fin de preparar a cristianos como catequistas, coordinadores y presidentes de sus parroquias y de las celebraciones litúrgicas, las cuales son totalmente necesarias para que la vida de la Iglesia perviva y crezca en los pueblos y aldeas de Asturias.
            Sin embargo, ¿qué pasaría si, de repente, hubiera sacerdotes a cientos para cubrir tantas parroquias sin pastor? Pues sigo pensando lo mismo: que es totalmente necesaria esta formación de laicos. Tenemos que ir pasando de una Iglesia clerical, en donde el párroco es todo, a una Iglesia Pueblo de Dios, en donde laicos y párroco caminamos juntos hacia Dios y en donde cada uno tiene una misión y unos carismas, que no son mejores ni peores; simplemente esos carismas son regalo del Espíritu del Señor para todos los cristianos a fin de caminar en su Iglesia y ser testimonio ante el mundo.




Catequesis mistagógica sobre los ritos de la Misa (II)

El 10 de abril de 2013 tuvo lugar en la Basílica del Sagrado Corazón de Gijón la segunda catequesis sobre los ritos de la Misa.
A continuación os pongo el enlace para escuchar la charla. Si queréis ver el escrito tenéis que buscar la catequesis que impartí el 6 de febrero de este mismo año.
Un abrazo y que Dios os bendiga.


                          Andrés

Catequesis en audio (II)

Catequesis mistagógica sobre los Ritos de la Misa

Charla en audio

Aquí os pongo en audio la charla que impartí en Gijón el 6 de febrero sobre los ritos de la Eucaristía. Se trata de una catequesis mistagógica. Nada más pude llegar hasta la explicación de la homilía. A ver si en otro momento completo lo que falta.

Un abrazo


                        Andrés




                                                               SANTA MISA
Catequesis mistagógica:
A la hora de anunciar el mensaje cristiano, esto se hacía en la antigüedad en cuatro pasos:
1) Era el Kerigma, o lo que es lo mismo, el anuncio de lo fundamental cristiano: la encarnación del Hijo de Dios en un hombre como nosotros, su pasión, muerte y resurrección por nuestra salvación y por el perdón de los pecados. Esto se hacía a los paganos, o sea, a aquellos que no conocían a Cristo ni su evangelio.
2) Un segundo momento era el catecumenado. Aquellos paganos que se habían sentido tocados por la gracia de Dios con el anuncio del kerigma, pedían su ingreso en la Iglesia y recibían instrucción en lugares apropiados. Se profundizaba en el evangelio y esto podía durar unos tres años. Podían asistir a la primera parte de la Eucaristía, la liturgia de la Palabra, pero, al ofertorio, debían de salir del templo.
3) Había un tercer momento, que podía durar el tiempo de la cuaresma. Se les presentaba a la comunidad junto con sus padrinos. Se les explicaba y se les entregaba el Símbolo de la Fe, es decir, el Credo. Entonces tenía comienzo la catequesis propiamente dicha, que tenía un doble aspecto: formación en la doctrina, y formación espiritual, de ruptura con las costumbres paganas. Este tercer período del catecumenado concluía con el bautismo de los catecúmenos.
4) La última etapa era la llamada catequesis mistagógica, que recibían los recién bautizados por parte del Obispo, durante la primera semana de la Pascua. Era una explicación a la que solo tenían acceso los ya bautizados, acerca de los sacramentos y sus figuras bíblicas y el sentido de los ritos. La “mistagogia” es la iniciación de los recién bautizados (neófitos) en los misterios del cristianismo.
Mistagogía. Esta palabra griega significa literalmente: conducción de los iniciados hacia el misterio

Posturas y ropas
            En la Misa hay una serie de posturas y ropaje, que a gente de fuera o sin conocimiento puede parecerle que hay un hombre vestido de payaso y los que están dentro hacen teatro de tanto levantarse, sentarse, arrodillarse, darse la mano, ponerse en fila, hacer la señal de la cruz, etc.
            - Explicar las ropas: alba, cíngulo, estola, casulla, colo­res.
Blanco : Fiestas de Nuestro Señor Jesucristo, Navidad, Pascua, fiestas de María Santísima, santos no mártires. Símbolo de gloria, alegría, inocencia, pureza del alma.
 Rojo : Pentecostés, Espíritu Santo, Fiestas de Apóstoles y mártires. Significa fuego de la caridad y sangre derramada por Cristo.
 Verde : ordinario del año. Significa esperanza.
 Morado : Adviento y Cuaresma. Funerales y aniversarios. Signo de humildad y penitencia, de dolor y sufrimiento.
 Rosado : Estas casullas se pueden usar sólo en dos domingos al año. El domingo gaudete y el domingo laetare, ambos en la mitad del adviento y en la mitad de la cuaresma. Esta antiquísima tradición quería expresar que ya quedaba poco para que llegara el tiempo feliz del Nacimiento de Cristo en un caso, y de la Resurrección en el otro. Significa: alegría, amor.
En algunos lugares:  Azul : Inmaculada Concepción.
Alba.  Del latín "alba", "blanca". Vestimenta de todos los ministros en la celebración litúrgica, desde los acólitos hasta el presidente. Simbolismo: Tiene un sentido bautismal. La pureza del alma lavada por el bautismo.
Cíngulo Del latín "cingulum", de "cingere", ceñir. Cordón con que se ciñe el alba. Simboliza: castidad.
Estola. Vestimenta litúrgica en forma de larga y estrecha banda que deben llevar los ministros ordenados y solo ellos. Obispos y sacerdotes la llevan sobre el alba, colgando del cuello hacia el frente. Los diáconos la visten sobre el hombro izquierdo y la fijan a la derecha de la cintura. Generalmente es del mismo color que la casulla. Simbolismo: la autoridad sacerdotal.
Casulla.  Del latín "casula", "casa pequeña" o tienda. La vestidura exterior del sacerdote, por encima del alba y la estola, a modo de capa. Origen: el manto romano llamado "pénula". El color cambia según la liturgia. Simbolismo: el yugo de Cristo y significa caridad. “Llevar el yugo del Señor significa ante todo: aprende de Él. Estar siempre dispuestos a asistir a la escuela de Jesús. De Él debemos aprender la pequeñez y la humildad –la humildad de Dios que se muestra en su ser hombre”, Benedicto XVI. “Algunas veces quisiéramos decirle a Jesús: Señor, tu yugo no es para nada ligero. Más bien, es tremendamente pesado en este mundo. Pero al mirarlo a Él que ha cargado con todo –que en sí ha probado la obediencia, la debilidad, el dolor, toda la oscuridad, entonces todos nuestros lamentos se apagan”, Benedicto XVI.
            - Los cantos unen a la gente.
            - Respuestas, todos a la vez, no con la boca cerrada. No dejar de responder por vergüenza o miedo. (Caso de la mujer que quería cantar en un coro y su marido la echaba para atrás).
            - Silencios.
            - Gestos o ritos, la señal de la cruz, decente. Gesto de la paz, no de mala gana o la mano sin apretar y sin mirar.
            - Arrodillarse, como signo de adoración y fe.
            - Manos levantadas del cura.

Ritos iniciales de la Misa
            - Genuflexión y venerar el altar con un beso (donde Cristo va ser sacrificado, reliquias de los mártires y de los santos).
            - En nombre de la Trinidad se comienza la Misa. Con tres dedos y dos dedos à Sta. Inés.
            - Saluda "con vosotros" à es diálogo, es presidente el cura, es Cristo. El cura es fiel cristiano y a la vez hace presente a Cristo.
            - Acto penitencial, reconocimiento de nuestro ser pecadores, no de los pecados concretos. No es tiempo para un examen de conciencia. Se da el perdón de los pecados veniales.
            - Kyrie eleison, aclamación. Juan Pablo II te quiere todo el mundo. Hala Madrid.
            - Gloria, himno compuesto por los primeros cristianos del siglo II. Vuelve otra vez la estructura trinitaria.
            - Oración colecta, ‘coleta’ à se ‘recogen’ los sentimientos de la asamblea.

Liturgia de la Palabra
            Instruye al Pueblo, revela la salvación y hace presente al Señor. Y el pueblo en diálogo acepta esta palabra (Palabra de Dios à te alabamos, Señor, confieso y reconozco que esta Palabra me da vida, por eso ‘te alabo, Señor’; pero decimos ‘te alabamos’ lo hacemos en comunidad).
            - Domingos y festivos. 1ª AT, salmo responsorial, 2ª NT, evangelio. Importancia de hacerlo bien, que se entienda, no rápido, prepararla: trazan sendas por el mar (Tarzán de las selvas), tu mujer como parra fecunda, grito estentóreo (Ester toreó), Espíritu Paráclito. Importancia de llegar antes para reposar nuestro espíritu.
            - Homilía: instrucción del pueblo y aplicación a su vida diaria. Como minifalda: corta, ceñida y que enseñe.
            - Credo. Fórmula trinitaria. Creo en Dios, Padre todopodero­so (¿por qué no acaba con las guerras? y, sin embargo, todopode­roso). Credo no es recitar, es poner todo mi ser en ello. El es todopoderoso. Creo en Jesús nacido, muerto, resucitado para nuestra salvación. Creo en el E.S. (‘déjese de devociones raras’). Creo en la Iglesia (à S. Cipriano "no puede tener a Dios por Padre, quien no tiene a la Iglesia como madre"). Creo en la comunión de los santos (vivos, difuntos àfunerales, aniversa­rios, sino no tiene sentido orar por ellos, los del cielo). Creo en la resurrección.
            - Oración de los fieles, donde se pide por nuestras necesi­dades, las de la Iglesia, las del mundo, no sólo por mis cosas. Senti­do de catolicidad (universalidad).

Liturgia de la Eucaristía
            - Ofertorio: Se presentan pan, vino, nuestras propias vidas y personas. Nos ofrecemos nosotros y nuestras obras de la semana. El agua en el vino no es para rebajar el vino (recuerda el agua que salió del costado de Cristo junto con la sangre, y signo de participación divina. Leer oración).
            - Colecta, signo de comunión y de amor mutuo. Para atender las necesidades de la propia comunidad. Es ya una tradición muy antigua. La gente compartía lo que tenía para hacer visible la comunicación de bienes. ¿Cuánto dinero del que gano destino para los demás? Es el dinero de Dios.
            - Prefacio, es alabanza al Señor y acción de gracias. Es nuestro deber y salvación darte gracias y glorificarte. Habla de las maravillas del Señor. Y termina con el Santo, canto de alabanza recogido de los labios entusias­tas de los israelitas en Jerusalén. Hay varias formas de oración: petición, de acción de gracias (yo, para mí, conmigo), y la alabanza, que es la más sublime: el santo. Los santos hacían sobre todo oración de alabanza y cada vez más.
            - Plegaria eucarística. Leer despacio el cura las oraciones, no a las carreras. No ruti­nariamente. Hay varias. La más antigua es la 2ª. ¿Cuántas misas habéis escu­chado? ¿Cuántas misas he celebrado? Una. Sólo hay una misa, la que Jesús hizo con los apóstoles el Jueves Santo, antes de sufrir la pasión. Sólo que Cristo nos hace presentes en aquel momento, o se hace el presente junto con los apóstoles en nosotros. Cristo sólo entregó su vida, su carne, su sangre una vez. No es teatro lo que hacemos nosotros de una cosa que sucedió hace casi 2000 años. Verdaderamente somos transporta­dos a aquel momento de un modo misterioso. Vamos a seguir el modelo de la 2ª plegaria para explicar su contenido:
                        * Él es fuente de santidad, no nuestro esfuerzo.
                        * El ES por las manos del cura viene para la consagra­ción.
                        * El cura le presta los labios, la lengua, la garganta para las palabras de la consagración. El cura presta su voz y deja de ser él para ser Cristo Jesús, que es el único que puede consagrar y convertir pan en Cuerpo de Dios, y vino en Sangre de Dios.
                        * "Tomad y comed", no "Tomad y ved como come el cura".
                        * Cuerpo entregado, despedazado por nosotros. Sangre derramada por nosotros para el perdón de los pecados.
                        * Haced esto en memoria mía. Ir a Misa es mandato del Señor. Por eso quien no quiere ir a Misa o la "pira", reniega del este deseo de Cristo, pasa de su Palabra, pasa de su cuerpo que da vida, pasa de los cristianos.
                        * Este es el Sacramento de nuestra fe, algo incomprensible. El resumen de nuestra fe es éste: ‘Anunciamos tu muerte’, porque realmente has muerto. ‘Proclamamos tu resurrección’, pues la muerte no puede contigo. Tú eres Dios de vivos y no Dios muerto y Dios de muertos. ‘Ven, Señor Jesús’, respuesta del cristiano.
                        * Después se hacen algunas súplicas que el Espíritu Santo una a los fieles, porque muchas veces gente que comulga al mismo Cristo, y no se traga. Eso es un sacrilegio.
                        * Se pide por toda la Iglesia, por los difuntos, por todos los difuntos, por los nuestros y por los que nadie se acuerda, se pide la intercesión de María, de los apóstoles, de los santos. Y se da la gran aclamación (doxología) final con estructura trinitaria (leer). Todo honor es para Dios, no podemos robarle nada de honor al Señor, y se termina con el Amen.

Ritos de la comunión
            Para comulgar se preparan los fieles con varios ritos.
            - Padre nuestro, la oración de Jesús.
            - La paz que nos es ofertada por Cristo y nosotros la com­partimos. Caso de Adolfo Suárez, que se le negó la paz. ¿Dónde estamos? ¿Qué clase de fe y de cristianismo es el nuestro? Esto está recogido en el mandato de Jesús: “Si al presentar tu ofrenda sobre el altar recuerdas que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda delante el altar y vete a reconciliarte con tu hermano y después vuelve a presentar tu ofrenda”(cfr. Mt 5, 23-24). Si rechazas la paz de Dios a través de otros, rechazas entonces la paz de Dios, y en vez de comulgar, tragas hostias.
            - Fracción del pan. Así se llamaba antes la Misa (Hch. 2, 42). Reproduce el gesto de Jesús al partir el pan y repartirlo entre sus discípulos (Lc. 22, 19). Partir el pan y repartirlo, signo de amor y comunión. Como una madre trocea los alimentos y los reparte entre sus hijos. Cristo despedazado y roto. Aunque sea un trozo pequeño, comulgamos a Cristo entero.
            - Invitación a la comunión. Este es el Cordero de Dios, y contestación del centurión romano: ‘Yo no soy digno...’
            - Comunión. Se comulga a Cristo entero, no un trozo, aunque sólo sea el cuerpo y no la sangre à se dejó por contagio de enfermedades.
                        * 1 hora de ayuno. No la rompen ni el agua ni las medicinas. No están obligados a guardarla ni los enfermos ni quienes los atienden.
                        * Comulgar con mano o en la boca. Explicar el modo. Y decisión de los fieles, no del cura.
                        * ¿Cuántas veces se puede comulgar al día?
                        * Comulgar en gracia de Dios.

Ritos finales
            Oración de postcomunión.
            Saludo final y bendición, también trinitaria.