BAILANDO BAJO LA LLUVIA

No falló el GP de Canadá, para mi el mejor y más entretenido del año con diferencia y si a eso le unimos que llego la lluvia,pues mejor. Como bien dice el refrán,nunca llueve a gusto de todos, es bendita cuando tienes un coche que no corre y esperas que con tus habilidades te sitúe más arriba o jodida lluvia cuando tienes previsto que tu coche este  fin de semana sea bueno y te deje en la cuneta.
No dejo de reconocer que las carreras con pista mojada son apasionantes y más cuando las condiciones del piso son cambiantes,pero últimamente se han empeñado en fastidiarnos.Señores !!ESTO ES LA F1 Y NO UNA CARRERA DE ABUELITAS CON CARRITOS DE LA COMPRA!!, aunque ha veces lo parezca. Se han empeñado la FIA vs Dirección de carrera en que hay que salir a correr con la pista en las mejores condiciones posibles, bien, loable, una pista en malas condiciones es peligrosa y al final los que se juegan el pellejo son los pilotos, pero hay límites y límites, no es de recibo que nos roben 20 vueltas de una carrera detrás del puñetero coche de seguridad porque esté mojado, se les suponen ser la élite del automovilismo con alta carga de testiculina, señores que si es peligroso que no corran, que se bajen del coche o como bien dijo Jaime al final de carrera, "se corre más despacio y punto". Desde que la F1 es lo que  es, siempre se ha corrido en esas condiciones, que ya sólo faltaba que sacaran gamuzas y secadores de pelo para dejaran la pista limpia y sequita.
Yo comprendo que la salida es un punto delicado y después de lo ocurrido en Spa en 1998 lo veo bien,

pero después de dos giros, para adentro y a volar y no que parece la caravana de vuelta de la playa los domingos,y lo peor es que tiene antecedentes por lo que ya es un método a seguir.
Pero lo que si es de película de miedo es lo de Ferrari, ya no es sólo que tengas la mala suerte, que para una vez que el coche va bien y estas en condiciones de luchar por la victoria, !zas, va y llueve!, sino que encima te encargas tú de empeorarlo. La verdad es que peor es imposible y la cara de tonto no se me quito hasta que Button lo echo de la pista. ¿Cómo puedes meter el coche a cambiar a intermedios una vuelta antes del diluvio?, con un presupuesto de 400mill de euros de presupuesto ¿qué sistema meteorológico de chichinabo tienen? por lo visto es el mismo que la cagó el año pasado en malasia cuando los dos ferraris se quedaron en la Q3 porque no se preveía que lloviera y digo que si lo hizo. Vamos, increíble ,si hubieran caído cuatro gotas y 4 vueltas después pues dices mala suerte pero diluviar una vuelta después cuando ya lo hacía y fuerte cuando le cambiaban las gomas, !vamos, vamos!. Y esto me recuerda a todos los fallos cometidos el pasado año que condujeron a Fernando a perder el mundial, se siguen cometiendo y deberían limarse ya que si el próximo año quiere aspirar al titulo, cosas así te pueden dejar fuera.
Fue una carrera de infarto,quien iba a pensar que le robaran la cartera al jefe en la última vuelta,las constantes salidas del coche de seguridad ayudo mucho, Button que siguió el estilo de su compañero tropezando con todo lo movible,con 6 paradas en boxes y una penalización,que debieron ser más, pero  con ruedas más nuevas fue recortando y superando posiciones. Dicen que no hay mal que por bien no venga y eso le pasó al ingles,entro a cambiar sus neumáticos tras el toque con Alonso y eso le dio la victoria, eso y ser uno de los que mejor saben nadar dentro de todos los líos que se producen en este tipo de carreras ya que no es la primera que se mete en el bolsillo. 
Muchas veces se comento que  Vettel este año no cometía errores pero es que nadie le había presionado y cuando si lo hicieron, fallo. Es muy fácil correr con un coche que mas bien parece un tren, tanto la velocidad como por que parece que va por raíles. No es que le quite mérito al muchacho pero le falta aun ese puntito para considerarle gran piloto. Domino la carrera de cabo a rabo y al final un error propio le condujo a perderla. No es mal resultado para lo visto, pero el mal sabor de boca lo tendrá.
De caballo loco Hamilton que decir que no se haya dicho ya desde hace dos años, va de mal a peor. ¿a dónde iba esa criatura?¿por dónde pretendía adelantar a Button, por el césped? Lauda dijo después de la carrera "esta completamente loco. En algún momento, tiene que haber un fin para las bromas. No se puede pilotar así, ya que puede dar lugar a una muerte" y creo que no exagera un ápice o vuelve al redil o cualquier día pasara algo y serán luego todo lágrimas.
Por fin gran carrera de Michael aguantó bien el tipo y lucho con clase y categoría.Memorable el adelantamiento doble a Massa y Kobayashi.Grande Pedro, buen fin de semana, difícil por la adaptación y difícil por las condiciones, dio el callo y de no ser por el tropiezo con Button (otra vez este) seguro hubiera entrado en los puntos como hizo Jaime, por fin hombre, ya era hora, un octavo puesto que sale a gloria. Y los chunguitos, llámense Hispania ya lo son menos, acabaron los dos coches y por delante de tres más,bravo por ellos.
En fin 6 horas sentado delante de la tele con intrigas, errores, descalabros pero una maravillosa carrera de las que hacen época.

PREVIO AL GP CANADA

Todo el mundo que me conoce sabe que soy un tío muy comedido y respetuoso,pero después de la cara de tonto que se me quedo cuando empezó a llover a mares en Montreal, sólo quiero mostrar de forma musical lo que opino de todo el staff técnico de Ferrari,con el Sr Domenicali a la cabeza y sin olvidarme del Sr Alonso por lo comentado después de la carrera.  

Domingo de Pentecostés (A)

12-6-2011 PENTECOSTES (A)

Hch. 2, 1-11; Slm. 103; 1 Co. 12, 3b-7.12-13; Jn. 20, 19-23



Homilía de audio en MP3

Queridos hermanos:

Celebramos en el día de hoy el último día de Pascua, y este tiempo se cierra con la festividad de Pentecostés: la venida del Espíritu Santo sobre la Virgen María y los apóstoles, sobre la Iglesia.

Dice la secuencia de Pentecostés que acabamos de escuchar:

“Ven, Espíritu divino,
manda tu luz desde el cielo
.

Padre amoroso del pobre;

don, en tus dones espléndido.

El domingo pasado se ordenaron tres nuevos sacerdotes. El sábado por la noche vino uno de ellos a mi casa para confesarse, ya que quería estar en gracia de Dios para recibir el sacramento del orden sacerdotal. Una de las cosas que le dije es que, muy pronto, reconocería en sí mismo una serie de dones y carismas que Dios había puesto desde toda la eternidad en él para edificación y construcción de la Iglesia de Cristo; eran dones y carismas para el bien de sus hermanos, los hijos de Dios. Y le dije esto, porque recordaba cómo años atrás yo también descubrí una serie de dones, que hasta ese momento estaban escondidos en mí, sin que yo los conociera, y que fueron apareciendo a medida que mi tarea pastoral se fue desarrollando. Principalmente yo descubrí tres dones: el primero en el sacramento de la confesión: una cierta facilidad para mostrar el pecado en el corazón del hombre, pero sobre todo para mostrar el amor y la paciencia de Dios en ese hombre pecador. El segundo el de la dirección espiritual: con el don de consejo y de sabiduría para ayudar a descubrir a Dios en la vida del hombre, a profundizar en la fe y en Dios, y a perseverar en esa relación con Dios y con los demás, según el evangelio de Cristo. El tercero apareció más tarde: era el don de la predicación, para exponer de modo claro y sencillo a Dios, su doctrina y su voluntad. Eran dones para los otros, no para presumir y crecer a costa de ellos o apropiarse de ellos. Humanamente, yo soy tímido y poco hablador. Por eso y por tantas experiencias de todo esto, sé, a ciencia cierta, que estos dones no provienen de mí, sino de Él.

Y lo mismo que yo tengo unos dones para bien de la Iglesia y de los hombres, y lo mismo que esos dones provienen de Dios y no de mí, igualmente sé que Dios no agota sus dones en mí. No. Él los entrega a manos llenas, como dice la Secuencia de Pentecostés (“Espíritu divino […] don, en tus dones espléndido”), a otros sacerdotes. Pero el Espíritu no entrega sus dones sólo a los sacerdotes, también a los laicos, a vosotros. ¿Habéis ya descubierto cuáles son los dones y carismas que Dios ha puesto en vuestro ser para bien de su Iglesia y de todos los hombres? Algunos tendréis el don de la paciencia de los ancianos, otros el don del perdón, otros el don del servicio, otros el don de fortaleza en medio de las adversidades, otros el don de amar y educar a los niños o jóvenes, otros el don de la oración silenciosa y reposada ante el Amado, otros el don del matrimonio y el de la paternidad, otros el don de la humildad, y un largo etcétera. Por eso, dice San Pablo en la segunda lectura: “Hay diversidad de dones, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de ministerios, pero un mismo Señor; y hay diversidad de funciones, pero un mismo Dios que obra todo en todos. En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común […] Todos nosotros […] hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo. Y todos hemos bebido de un solo Espíritu”. ¿Cuáles son los dones que Dios y su Santo Espíritu han sembrado en ti? ¿Los reconoces, los estás poniendo al servicio de su Iglesia y de todos los hombres? Pide luz al Espíritu para ello.

Sin embargo, no es fácil conjugar los dones que los hombres tenemos. ¿Por qué? Porque nosotros, además de los dones, tenemos nuestros propios pecados. Y estos sí que proceden de nosotros. “Cuentan que, a media noche, hubo en la carpintería una extraña asamblea. Las herramientas se habían reunido para arreglar las diferencias que no las dejaban trabajar. El Martillo pretendió ejercer la presidencia de la reunión, pero enseguida la asamblea le notificó que tenía que renunciar: -No puedes presidir, Martillo –le dijo el portavoz de la asamblea-. Haces demasiado ruido y te pasas todo el tiempo golpeando. El Martillo aceptó su culpa, pero propuso: -Si yo no presido, pido también que sea expulsado el Tornillo, puesto que siempre hay que darle muchas vueltas para que sirva para algo. El Tornillo dijo que aceptaba su expulsión, pero propuso una condición: -Si yo me voy, expulsad también a la Lija, puesto que es muy áspera en su trato y siempre tiene fricciones con los demás. La Lija dijo que no se iría, a no ser que fuera expulsado el Metro. Afirmó: -El Metro se pasa todo el tiempo midiendo a los demás según su propia medida, como si él fuera el único perfecto. Estando la reunión en tan delicado momento, apareció inesperadamente el Carpintero, que se puso su delantal e inició su trabajo. Utilizó el martillo, la lija, el metro y el tornillo. Trabajó la madera hasta acabar un mueble. Al terminar su trabajo, se fue. Cuando la carpintería volvió a quedar a solas, la asamblea reanudó la deliberación. Fue entonces cuando el Serrucho, que aún no había tomado la palabra, habló: -Señores, ha quedado demostrado que todos tenemos defectos, pero el Carpintero trabaja con nuestras cualidades; son ellas las que nos hacen valiosos. Así que propongo que no nos centremos tanto en nuestros puntos débiles, sino en la utilidad de nuestros puntos fuertes. La asamblea valoró entonces que el Martillo era fuerte; el Tornillo unía y daba fuerza; la Lija era especial para afinar y limar asperezas; y observaron que el Metro era preciso y exacto. Se sintieron orgullosos de sus fortalezas y de trabajar juntos”.

Con esta homilía de hoy quisiera que descubriéramos lo siguiente: -Todos somos amados de Dios y por eso nos ha llenado de sus dones. –Lo malo que hay en nosotros… es nuestro y no procede de Dios, ni… del vecino del quinto. –Nadie es perfecto, salvo Dios. –Todos estamos llamados a construir la Iglesia de Dios en este mundo, que también es de Dios. –La construcción la dirige Dios mismo, no las leyes de la naturaleza.

DISCRIMINACIÓN POSITIVA

Como bien dice la constitución española en su articulo 14 del capitulo II, Los españoles son iguales ante la Ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social. Bonitas palabras para un concepto bien loable,que debería ser doctrina a seguir por todos,con una filosofía de igualdad imprescindible en un estado democrático como base para una convivencia plena y satisfactoria.
Pero como bien sucede con otros artículos constitucionales,léase el  47 que determina que todo español tiene derecho a disfrutar de una vivienda digna,ja,ja,ja,ja....... perdón por el lapsus,no he podido evitarlo, del deseo a la realidad hay un buen trecho.Las doctrinas,cuando son demagógicas son menos doctrinas.
Sabemos todos que realmente no existe igualdad,la discriminación siempre ha existido y por desgracia siempre existirá,siempre habrá,por la naturaleza propia de la humanidad ,seres que se consideraran superiores a otros y esa multitud de razones son las que conducirán a una mujer cobrar menos por su trabajo o a un extranjero ser insultado por su color o nacionalidad,por poner algunos ejemplos.Estas discriminaciones son difíciles de erradicar ya que parten del interior del sujeto que las produce,que como ser independiente del resto, puede llegar a creer que sean loables.
La educación juega un  papel fundamental para conseguir una conciencia colectiva social sana,lo malo es que  no se pone lo suficiente por parte de todos para lograrlo.Lo realmente grave es cuando esas discriminaciones son creadas a  niveles institucionales,donde todo lo dicho anteriormente deja a un lado el civismo social y entra en juego la política,ese poder que tanto bien hace a nuestra sociedad,ja ja ja ja..... perdón,hoy tengo la risa fácil.Hay discriminaciones que no afectan tanto como otras,aunque seguramente, no piensen lo mismo todas aquellas barrigotas llenas que disfrazados de cargos políticos  tuvieron que dejar su puesto por la bien conocida paridad democrática. Lo malo de esto es que en ocasiones esa discriminación puede perjudicar a muchas personas,sin querer queriendo,como decía el bueno del Chavo del Ocho,y me refiero a la ley de violencia de género.
Quiero dejar  bien claro desde el principio, para que no exista la más mínima duda, que para mi la violencia machista es uno de los canceres más graves que han existido y existen en la sociedad.Las dos bofetadas bien dadas eran por desgracia el pan nuestro de cada día en infinidad de mujeres que en el pasado se atrevían siquiera a  toser cualquier cosa que hacía o decía "su señor".Si a esto unimos el,no te preocupes cariño,es tu marido y es al que tienes que deberle fidelidad y obediencia,pues apaga y vámonos.Pero no,no había posibilidad del  irse así que sólo quedaba aguantar,eso sí, a guantazo limpio.
Ha cambiado tanto la vida que los aires de libertad y de insumisión  han ido aumentando,por fortuna y el concepto  de dependencia-subsistencia bajo el yugo  del machito de turno cada vez son menores,pero esas aguas traen estos lodos.Matar,agredir,atemorizar,maltrato psicológico,el no dejar vivir a una mujer por el simple hecho de considerarla "una propiedad personal" es criminal,vomitable,vergonzante,inadmisible y la justicia debería castigar con toda la fuerza con las que dispone el estado de derecho para acabar con esos despreciables ,y con ese fin fue creada la ley de Violencia de Genero que lo que hace,o mas bien pretende conseguir eso.
Que todo el peso de la justicia recaiga en ellos es un acto loable, pero cuando hay más intención que efectividad surgen otros problemas que sin medios ni recursos son difíciles de solventar.El conseguir que una maquinaria funcione perfectamente requiere un tiempo de rodaje, pero hay veces que existen piezas del mecano que no encajan.Dentro de esta ley hay una pieza mal encajada y se llama discriminación positiva.La creación de distintos patrones de actuación, tanto  policial como judicial, dependiendo del tipo de delito cometido y sobre todo  de quien lo cometa, convierten esta ley en un arma peligrosa en manos de despechadas (pocas por fortuna) que la utilizan para hacer daño y mucho a  antiguas parejas y sería bueno que algunas alarmas saltaran.

Las denuncias falsas y sobre todo las consecuencias que ellas conllevan son una lacra que también se debería solucionar.Para una mujer sale gratis hacerlo,sí suena duro,pero es la realidad y sin ninguna consecuencia para ella.Se detiene al sujeto,sea cual sea el lugar,se le lleva a declarar,se le retiene,se le adoptan unas medidas cautelares de alejamiento, custodia y posteriormente en libertad,ojo,sin poder defenderte hasta el juicio ya que aunque ella no tenga pruebas de lo denunciado así se actúa.Y sí, esto se repetirá las veces que ella quiera y aunque parezca mentira con coste 0 para la denunciante,pero al que lo sufre le  cambia la vida,siempre con el temor,las 24 horas del día acompañado o con coartada,ojo que sean fiables por si acaso,pero eso no es siempre así.

Pero siempre nos quedará el recordar que estamos en un estado de derecho,que toda persona es inocente mientras bla,bla,bla.. que el camino a seguir es denunciar las acusaciones falsas para evitar que se vuelvan a producir,etc....pero no,no es así,NO SIRVE PARA NADA,y mientras sean simplezas no resulta del todo grave,pero cuando se rebasan ciertos escalones ya el tema varía y la cárcel puede llegar a la vida de cualquiera sin verlo venir.Hay que buscar soluciones y una de ella sería la actuación de oficio por parte de la justicia cuando se demuestre que esto esta sucediendo,actuación que  debería ser automática,eso sería lo lógico pero ni eso ni lo contrario.
Hace algunos años la Juez Decana de Barcelona Maria Sanahuja alertó del posible abuso en las denuncias sobre violencia doméstica.La juez escribió en un diario nacional lo siguiente:'la sensación de que algunas personas usan la fase de instrucción para tener mejor situación en la separación y se está abusando de las denuncias en los juzgados'. Esta afirmación desató el inmediato rechazo de las asociaciones de mujeres maltratadas.Las críticas le llovieron de todas partes,feministas,políticos,incluso del CGPJ rechazando lo expuesto,posteriormente otros magistrados han empezado a secundarla.El esconder la cabeza debajo de la tierra como las avestruces no elimina el problema,habría que pensar seriamente solucionar el problema por el bien de todos los inocentes lo sufren.
Hay que dar un paso adelante,generar una ley que sea justa,que exista un seguimiento caso a caso del historial denunciante,que se endurezca fuertemente las penas a los maltratadores pero también contra toda aquel o aquella que utilice esto deliberadamente para perjudicar a la pareja,que  el proceso policial sea igual para todos sean cual sean los delitos,eso sí dando la mejor cobertura posible a tod@s aquell@s que lo sufren.Esperemos que más pronto  que tarde se consiga.

Domingo de la Ascensión del Señor (A)

5-6-11 DOMINGO DE LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR (A)

Hch. 1, 1-11; Slm. 46; Ef. 1, 17-23; Mt. 28, 16-20



Homilía de audio en MP3

Queridos hermanos:

La Ascensión del Señor no es un episodio aislado, el último, de la historia de Jesús; Tampoco podremos verlo como un hecho independiente y separado temporalmente de su misma Resurrección. La Ascensión del Señor es el punto final del evangelio y de la presencia de Cristo resucitado entre sus discípulos; y es también el inicio de la misión de la Iglesia representada en los apóstoles. Esta misión se funda en las palabras de Jesús: “Id y haced discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; y enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado”.

- MIRAR AL CIELO

En la primera lectura se nos narra cómo los discípulos de Jesús se quedaron mirando para el cielo viendo cómo Él desaparecía entre las nubes delante de ellos. Los discípulos se sintieron huérfanos y abandonados al no ver más a Jesús entre ellos. Desde ese día los cristianos siempre buscamos con ansia a Jesús. Los cristianos no podemos estar solos; no podemos estar sin Él, pues nos sentimos desamparados, y por eso miramos al cielo. Pero los ángeles de Dios nos tocan el hombro y nos sacan de nuestro ensimismamiento: “¿Qué hacéis ahí plantados mirando al cielo? El mismo Jesús que os ha dejado para subir al cielo, volverá como le habéis visto marcharse”.

- MIRAR A LA IGLESIA

Sí, Dios nos saca de nuestra comodidad, de ese estar “pasmados” en tantas ocasiones mirando para el cielo, como esperando que la solución nos venga de arriba. Sí, Dios nos recuerda una y otra vez la misión que Cristo nos confío: “Id y haced discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; y enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado”. ¡Hay tanto que hacer!

MIRAR A LA IGLESIA. El sábado pasado fui hasta mis parroquias de Somiedo. En estas parroquias celebro el último sábado de mes. Si nieva y no se puede subir, ese mes se quedan sin Misa y en invierno pueden estar hasta 3 meses seguidos así. Ese sábado me acompañaron dos amigos: un chico y una chica. Llevamos la comida, pues íbamos a estar todo el día por allá. Llevamos la ropa de celebrar, los libros, las formas, el agua, el vino… Salimos de Oviedo a las 9 de la mañana. A las 11 teníamos la primera Misa. A las 10,30 entramos en una iglesia destartalada y llena de goteras. En la sacristía no me podía revestir, pues estaba desarmada y llena de cascotes; al lado de la sacristía hay una capilla y tampoco me podía revestir allí, pues ya me dijeron el primer día que llegué que el techo podía caer en cualquier momento. Una mujer mayor me dijo que había venido temprano para achicar el agua de las goteras, que estaba en el suelo. Celebré para 3 personas ancianas y para mis dos amigos. A ellos se les caía el alma a los pies. Algo parecido sucedió en las otras cuatro parroquias: Misa de 12,15 horas; Misa de 13,30 horas; Misa de 16 horas; Misa de 17,15 horas. En una de las parroquias un hombre que vive en Gijón y que iba a entrar en una de las Misas dijo a un vecino que estaba por allí trabajando: ‘¿Cómo no vienes a Misa?’ A lo que éste contestó: ‘Yo voy a la segunda’. Por supuesto, no había una segunda Misa en aquella parroquia y en ese día. Al terminar la última celebración, regresamos para Oviedo. Sé que ellos venían pensando en todo lo que habían vivido y yo en programar mi trabajo pastoral en Somiedo para el próximo curso, ahora que ya sé un poco más a qué me enfrento, si es que me dejan allí. Percibo en estas parroquias una gran pobreza, creo que humana, pero sobre todo pobreza espiritual y de fe. Les faltan medios, oportunidades y personas que les ayuden con su fe y a profundizar en ella. Así está la vida de fe y la Iglesia por allá.

MIRAR A LA IGLESIA. El lunes vino una persona desde una villa asturiana a hacer dirección espiritual y me contaba que tienen el templo cayendo. Han pedido un presupuesto para arreglarla: 300.000 € (50 millones de pesetas). Este es el presupuesto para arreglar una iglesia que está casi vacía de fieles. Me decía esta persona, que es algo mayor que yo, que ella era la más joven de los que van a los cultos, y me decía: ‘¿Arreglar la iglesia para qué? ¿Arreglar la iglesia para quién?’

MIRAR A LA IGLESIA. En estos días me encontré con un texto escrito por un fraile y hablaba de la Iglesia; no del templo de piedra o de ladrillo, sino de los templos de carne, hueso y espíritu: “Me duele la Iglesia. Veo el Cuerpo de Cristo ‘con fiebre’. En mi comunidad religiosa noto una degeneración: en conversaciones, en las formas, en las decisiones…. Va cada día decayendo más el espíritu. Es una de las consecuencias de esta cultura nuestra: amortigua las necesidades espirituales, ahoga, anestesia el mundo del espíritu dejando las personas en una vida natural, de la carne (a veces contranatural). Aquí veo esa pérdida progresiva del espíritu. Siento que ‘avanza este cáncer espiritual’, que va invadiendo terrenos y que hace insensible al Espíritu aquello que invade”.

- MIRAR A CRISTO, ESCUCHAR A CRISTO, OBEDECER A CRISTO

No tenemos mayores dificultades que tuvieron entonces los apóstoles o San Pablo u otros cristianos y santos en sus tiempos. Nuestra fe es cierta, la presencia y el amor de Dios son ciertos, el mandato del Señor es firme: “Id y haced discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; y enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado”. Nosotros no hablamos en nuestro propio nombre, sino en el nombre de Cristo, el Hijo de Dios. Él nos pide que sembremos. A Él le corresponde cosechar.

Una y otra vez os repetiré las palabras de confianza absoluta del profeta Habacuc: “Aunque la higuera no eche sus brotes, ni den su fruto las viñas; aunque falle la cosecha del olivo, no produzcan nada los campos, desaparezcan las ovejas del aprisco y no haya ganado en los establos, yo me alegraré en el Señor, tendré mi gozo en Dios mi salvador. El Señor es mi señor y mi fuerza (Hab. 3, 17-19). Nada ni nadie podrá apartarnos de ese Dios, en el que creemos y al que amamos. Si la realidad de la Iglesia fuera maravillosa, tendríamos que predicar y vivir el evangelio con la misma fuerza y el mismo entusiasmo que si la realidad de esta Iglesia fuera un auténtico desastre.